La rana glotona

La rana glotona

Jack Tickle (autor e ilustrador) y Carmen Gil (adaptadora): La rana glotona. Barcelona: Combel (col. Cu-cú sorpresa), 2009.

la rana glotona

La rana glotona es un libro sencillo pero rico en vocabulario, ritmo y expresión visual entre otras virtudes. Combina la preciosidad de su colorido vivo y contrastado, su trazo sencillo, de línea marcada y la vistosidad del despliegue de cada página con la musicalidad de su texto. Además, se sirve de los animales para ello, lo que gusta mucho en estas edades. Poesía de la mano de los animales. En esta ocasión, animales de jardín. Los protagonistas elegidos son: las mariposas, la rana, los pájaros, los conejos, el topo, las mariquitas y la araña. Cada uno con su poesía, con su pop-up en doble página y con onomatopeyas que lo acompañan.

Atractivo, en formato grande, tapa dura, cuadrado y con unos pop-ups bastante acertados. La rana, por ejemplo, mueve la lengua que crece para intentar cazar alguna mosca, las mariposas se elevan y «salen» del libro por la parte superior (un vuelo muy gráfico), etc.

En cuanto a la adaptación del texto, tarea normalmente complicada y yo diría que más aún cuando se trata de poesía, Carmen Gil ha salido más que airosa del paso, logrando unos poemas con ritmo y rima, manteniendo el sentido, la sencillez y la naturalidad.

Cada estrofa tiene cuatro versos octosílabos, ritmo muy cómodo para los pequeños que podrán ir memorizándolo:

La rana está muy atenta
porque ha visto en el jardín
una mosca suculenta
y quiere darse un festín

Es muy fácil encontrarle utilidad en el aula (y en casa) además de las inherentes a la lectura o narración de cuentos. Las posibilidades que ofrece para contar y mostrar a los más pequeños buscando interacción (a través de gestos, movimientos y/o sonidos) se pueden llevar a cabo de una forma muy intuitiva acompañados de este libro. Puede ser muy divertido, por ejemplo, hacer representaciones o usar los títeres para contarlo. Ponerle música a este texto también es una buena opción, ya que el ritmo sencillo ayudará a los niños a memorizar la canción y seguir la melodía. Jugar con los gestos y las onomatopeyas será también de lo más divertido. Podríamos tomar cada animal por separado y asociarle una melodía, un gesto y una onomatopeya para hacerlo juntos. Incluso tiene una muy fácil adaptación para una pequeña representación teatral hecha por los niños si ya son algo mayores.

Un libro ágil, divertido, con unos pop-ups muy atractivos, una conjugación de colores idónea para el ojo del pequeño, un texto sencillo pero rico, desenfadado, fresco. Una combinación ganadora.