Crónicas mecánicas
Manu Sánchez Montero: Crónicas mecánicas: aventuras en un futuro tecnológico. Ilustr. Lecticia Morgado. Meliana (Valencia): Kelonia, 2016. 130 pp.
Crónicas mecánicas narra la aventura del mecánico Varis y la reportera Cloe, que destaparán el complot de un malvado inventor para dominar Ciudad M. El título se debe a que la ambientación, que es de lo más logrado de la historia, se ubica en un futuro hipertecnologizado, con sus vehículos voladores y sus robots, y otros elementos que podrán resultar deliciosos para los jóvenes amantes de la ciencia ficción. Este futuro tiene varios puntos muy ingeniosos, que debemos alabar: la invención de «supernet» (una evolución de internet), la existencia de «horarios» (la versión acelerada de los diarios de noticias), o el hecho de poder tener un «sistema ambulatorio» en tu propia casa. Están así esparcidos, como pinceladas, sin detallarse mucho porque el texto en conjunto es breve, pero son suficientes para lograr el efecto deseado.
Todo ese, digamos, rollo inventor que da cuerpo al libro, mola. El autor sabe que puede ser un punto fuerte y, como maestro de Primaria que es, se ha preparado el terreno para la aplicación didáctica: trufadas en las páginas del texto hay varias imágenes que explican algunos de los aparatos tecnológicos de los que se habla en el libro: androide, motor diésel, display…
El título del libro, si se fijan, parece más el de una serie de libros que el de este libro en particular. Leyendo el epílogo queda claro que el autor pretende continuar la historia y realizar una serie de aventuras con estos personajes (Varis, Cloe, el inventor Samuel, el robot Jagg…), imaginamos que en esta misma editorial. Kelonia es una polifacética editorial, por cierto, con varias colecciones de género fantástico, y que también permite la autoedición (no es este el caso).
Confiamos en que la serie vaya ganando cuerpo, y el estilo del autor también, logrando flexibilidad sobre algunos clichés del género de aventuras. Nos ha parecido demasiado convencional, por ejemplo, ese momento en que el malo malísimo cree que ha atrapado a los protagonistas y les declara sus crudelísimos planes de conquista del mundo. En cambio, alabamos la construcción de la escena de la huida del protagonista, usando sus artilugios de la caja de herramientas (pp. 97 y ss.), que es ingeniosa y emocionante.
En definitiva, tenemos un libro entretenido de aventuras para niños, que permite conectar con unos simpáticos personajes y además proyectar la imaginación sobre las posibilidades de los inventos tecnológicos.