Hans Christian Andersen (texto), Joanna Concejo (ilustradora): Los cisnes salvajes. México: Fondo de Cultura Económica, 2012. Colección Clásicos del Fondo.

Muchos de los que andamos por aquí conocemos la historia de  Los cisnes salvajes, un clásico de la literatura infantil escrito por Hans Christian Andersen, donde se narra la historia de una malvada reina que, tras casarse con el rey, obliga a los hijos de éste (la bella princesa Elisa y sus once hermanos), siendo todavía muy niños, a irse de casa, quedando así desprotegidos. La reina, con sus malas artes, convierte a los niños en cisnes y a Elisa la envía a vivir con una familia de campesinos hasta que cumple los quince años. Llega el día en que la niña vuelve a palacio, pero la odiosa reina, al ver tal bondad y belleza, decide hechizarla para hacerla irreconocible a ojos del rey.  Elisa recibió el rechazo de su padre y empezó a vagar sin rumbo hasta que decidió ir en busca de sus hermanos. Tras encontrarlos y conocer el alcance del hechizo, se propone romperlo para salvar a sus hermanos.  Es aquí donde empieza una aventura donde el valor, el esfuerzo, el sacrificio, la creencia y la voluntad de Elisa lograrán revertir el hechizo y liberar a sus once hermanos para que se transformen definitivamente en hombres y puedan estar juntos toda la vida.

Una preciosa historia que nos hace reflexionar sobre los lazos familiares, el valor de la bondad y la inocencia, de la voluntad y el esfuerzo por conseguir nuestras metas a pesar de las dificultades. Pero no es la historia lo que me empujó a tener este ejemplar entre mis manos, sino su ilustradora.

Joanna Concejo me cautivó tras caer en mis manos Humo, un álbum en el que la ilustración desempeña un papel fundamental, otorgando a la obra mayor peso narrativo. En Los cisnes salvajes el texto ya es brillante por sí solo, pero si añadimos estas maravillosas ilustraciones hechas a lápiz con toques de colores llamativos, que parecerían ser un canto a la naturaleza y su belleza, se enriquece el conjunto de la obra. Infinidad de detalles que dotan de sensibilidad y emoción a cada uno de los personajes, sobre todo a su protagonista. Ilustraciones que cobran vida entre las páginas, a través de las cuales podemos sentir “los pájaros que cantan y la gente que sale de las páginas para hablarles a Elisa y sus hermanos”, como si tuviéramos en nuestras manos “el hermoso libro ilustrado que había costado casi medio reino”.

Una fantástica edición de FCE, que nos ofrece la posibilidad de seguir leyendo estas historias maravillosas a través de su colección Clásicos del Fondo, reinventando cuentos de toda la vida de la mano de grandes ilustradores.