¿Dónde viviré?
Rosemary McCarney (Autora). ¿Dónde Viviré? Barcelona: Editorial Juventud, 2017, 24 pp.
Una inocente mirada nos acerca una dura y cruda realidad. La realidad, de aquellos niños, aquellas personas, que por diversas razones se han visto obligados a abandonar sus vidas, abandonar sus hogares, abandonar sus lugares. La narrativa fotográfica, conformando un relato, nos traslada a distintos puntos del planeta. Lugares que comparten una triste historia: la huida del ser humano. Lugares de conflicto, de tránsito, de agrupamiento, lugares reales que nos llegan a través de grandes fotografías. Croacia, Hungría, Ruanda, Kenia, Líbano, Iraq, Myanmar. Europa, África, Asia. El mundo. Testigo de esta carrera.
Un rostro amable y tranquilo nos habla de la fragilidad. Fragilidad de las condiciones que sustentan la vida. Nos viene a la mente la fragilidad de la misma vida ante la delgada línea que la separa de la muerte, ante la escasa resistencia del hilo que cortan las Moiras. La fragilidad de los sistemas que debieran preservar y garantizar las condiciones de vida. Un rostro amable e inocente que nos habla de la fatalidad del destino.
El rostro de una niña escruta nuestro ser. Ser que se intranquiliza y nos interroga. Si, como grandes pensadores han expresado, la patria es la infancia, es el aire, es el suelo, el ambiente y los paisajes de la infancia, ¿qué patria les estamos permitiendo?
La fuerza en la mirada de una niña nos recuerda las palabras del poeta, «en la infancia se vive y después se sobrevive». Frase de la que inferimos el ímpetu y poderío contenidos en esta bella etapa. Una etapa frágil pero con la capacidad intacta de la ilusión y la esperanza. El juego y la amistad. El anhelo de un mundo mejor, ¿el mundo donde viviré?
Un rostro, una dulce mirada, pone en valor el trabajo y el esfuerzo de, y por, la literatura infantil. Su aportación, su empuje hacia un mundo mejor. Un mundo, como el que persigue Afonso Cruz, donde los valores humanos primen sobre los réditos económicos. Un mundo contra la discriminación, a favor del reconocimiento y la aceptación de las diferencias, mundos como los de Jérôme Ruillier, o los de Isabelle Carrier. Un mundo que no permita más situaciones como las ilustradas en este libro.
Rosemary McCarney, eterna luchadora y defensora de la infancia, es autora de distintos libros, narrativas fotográficas, como El camino a la escuela, sobre la importancia y el compromiso con la educación, o Querida Malala, recopilación de cartas de distintos niños del mundo solidarizándose con Malala, niña pakistaní, víctima de atentado talibán simplemente por ir a la escuela, y permio nobel de la paz 2014. En esta ocasión, la autora, nos acerca la situación de los niños refugiados . Una dura realidad con un canto a la esperanza. Esperanza a la que la Editorial Juventud, aportará los beneficios obtenidos por la venta de este libro, como remarca en la contraportada. ¡Sigamos todos el ejemplo! ¡Aportemos nuestro granito!