Rafa Ruiz (autor), Elena Hormiga (Ilustradora). Toletis. NubeOcho Ediciones. 2014

En este ejemplar encontramos 12 cuentos, tres por cada estación.

Rafa Ruiz nos sorprende con una alabanza a la naturaleza en cada uno de sus capítulos. Una de sus especialidades, el medio ambiente, se ve reflejada claramente a través de Toletis, nuestro protagonista.

El primer capítulo nos introduce a cada uno de los personajes, desde Toletis hasta su amigo Andrés al que llamará Tutan, su abuelo RA, el inspirador de ese amor por lo natural y su amiga Claudia. Ese afán por todo lo egipcio demuestra el porqué de cada apodo.

De este primer capítulo se desprende la frase ejemplarizadora de todo el libro, pronunciada por Ra, el abuelo:

¿Qué hace hoy el día?

No se podía hacer esperar algo de jardinería de guerrilla cuando Toletis necesita plantar manzanos y se  encuentra con la negativa de todo el pueblo.

Así comienzan las fantásticas aventuras de Toletis entre árboles, pájaros y sensaciones aromáticas, cromáticas y sonoras varias que a cada paso os descubre la naturaleza.

No solo las connotaciones poderosas sobre Ra donde encontramos la simbiosis entre el astro rey y el abuelo de Toletis, también tiene su protagonismo la señora Niebla, tan mutable y misteriosa como cada día decida despertarse y con la que se nutren las penas de los que la disfrutan.

Las analogías, símiles y metáforas que encontramos en la historia son de una ternura incalculable, propios de  alguien que verdaderamente ama el clima, la naturaleza y el tiempo.

… su cara era un mapa de mil caminos…

Las ilustraciones se suceden pintorescas a lo largo de cada estación con colores fuertes y vivos que contrastan unos con otros y que imprimen fuerza y sobriedad.

El recorrido que repasa la cultura del pueblo nos acerca un poco más a la niñez, donde las palabras, la vida en el campo, marcan definitivamente, provocando esos recuerdos que forman parte de Toletis, todos a través de la vida en un mundo rural donde está permitida la reflexión de cada detalle, incluso del silencio.

Con la llegada de un niño de la ciudad comprobamos como la infancia depende en gran medida del entorno en que se vive. Y cuando hablo de infancia me refiero a la imaginación y creatividad de los niños con esa dosis de ingenuidad que solo ellos pueden tener. La invención de un mundo diferente, mucho mas sensorial, con el que sin duda se identificarán o soñarán muchos, resulta un placer para los sentidos y la lectura. La simplicidad de un rayo de sol naranja y violeta que suena a violines…. ¡contagia!.

Una fantasía propia de la mismísima Pipi Calzaslargas, una aventura tras otra en un pequeño pueblo donde cada historia hace crecer la anterior, mientras que todo un año va pasando.

Soledad, amistad, ilusión, lenguaje, imaginación y fantasía son las palabras clave con las que nos encontraremos en este libro.