Mónica Sempere (autora), Fernando Martínez (ilustrador). Pequeños cuentos para leer en 1 minuto. Editorial Beascoa. 2015

Por fin, después de ese 3 de octubre donde tuvimos ocasión de conocer este cuento hemos tenido un huequito para dedicarles nuestros aplausos, bien merecidos por otra parte, a estos dos grandes autores, Mónica Sempere y Fernando Martínez.

Con el cuento en nuestras manos y expectantes por descubrir lo que encierran los cuentos, desde una visión divertida y cercana, donde nada es lo que parece o, precisamente eso, es justamente lo que hubiéramos pensado lejos de las extravagancias de las hadas.

Lo que sería un prólogo largo y aburrido se ha convertido en un juego en toda regla. La lectura ha pasado a contemplarse desde su lado más lúdico y todo gracias a las instrucciones de uso de este pequeño cuento de pequeños cuentos. Los autores nos proponen cual es la mejor manera de disfrutar de la lectura, esta en especial, basada en 24 micrrorrelatos inspirados a partir de los cuentos clásicos de hadas.  No sólo nos invita a la lectura, además nos invita a crear todo un nuevo panorama entorno a ella, de la mano de padres y familiares, descubriendo juntos esos cuentos que todos hemos oído, pero  que ahora se nos antojan diferentes, gracias a la inspiradora mirada de la autora.

Algunos son absurdos, otros picarescos, otros tan reales como la vida misma, pero todos ellos recogen otro punto de vista diferente al original que los enriquece y que propicia toda clase de nuevas interpretaciones. Cada uno de los microcuentos es único e irrepetible. Todo en esta historia rezuma confianza y cercanía. Será vuestra misión adivinar a qué cuento clásico pertenece cada uno de ellos y descubrir juntos, o inventar, o reescribir o versionar a partir de las ideas que encontramos en el libro. Cualquier pequeño detalle sirve, cualquier fragmento puede ser el detonante de la escritura creativa a la que nos anima.

Las ilustraciones que acompañan son impresionantes. Ya tuvimos oportunidad de ver el trabajo de Fernando con el detalle que nos obsequió tras la presentación, pero no os podéis ni imaginar el contenido pictórico de cada microrrelato. Encontramos reflejados cada uno de los principales personajes de los cuentos de hadas o por lo menos de alguno de los objetos talismán de los mismos. La portada interior nos invita a columpiarnos con las letras de la mano de una pequeña y divertida luciérnaga y con ella se abre paso al mundo de la fantasía.  Encontramos algunos detalles personales que el ilustrador ha querido reflejar, igual que en su caso la autora en algunas partes del texto y eso hace que sea todavía más encantador. A lo largo de las páginas encontramos diferentes estilos en su producción, desde unos personajes humanos rígidos y estáticos hasta otros personajes animales plasmados con suavidad, dulzura y delicadeza, más próximos a un entorno infantil. La cobertura que hace de los objetos también es única por la tridimensionalidad que les proporciona. Podemos verlo en los nenúfares. los zapatos de cristal o incluso la famosa manzana roja. Destaca entre todas ellas la imagen de una Caperucita plenamente artística en cuya mirada se refleja la inocencia perfecta de la niña.

Una colección de microrrelatos recomendadísima para todas las edades, desde pequeños a grandes, que te deja un sabor tan creativo y mágico que te pondrás a escribir o dibujar en el acto.