Miriam Koch (autora e ilustradora): Fede Diferente. Barcelona: Corimbo, 2013, 40 pp.

Fede Diferente es un cordero especial, cuyo apellido le define a las mil maravillas. No termina de encajar con los demás y se siente solo. No parece solo cuestión de que su lana sea rojiblanca (parece fiel seguidor del equipo del mítico Calderón), sino que en su fuero interno busca algo distinto, busca otra cosa. Un día sale en busca de ese algo que le falta y comienza un viaje de sorpresas y decepciones, siempre guiadas por el patrón de colores que tanto le fascina: un globo aerostático, un refresco, el póster de un gramófono, el toldo de una frutería o una valla de peligro; todos ellos, a rayas rojas y blancas, parecen guiar el camino de Fede.

Su viaje le lleva muy lejos y no siempre resulta sencillo pero como toda buena aventura, al final vale la pena. Nuestro amigo encuentra su lugar, su familia y su vida. No sabemos si ese algo que le faltaba era el mar, el faro o la verde pradera donde se instala a vivir. Es posible que ni siquiera fuese algo externo, sino una necesidad interna de Fede. Lo esperanzador es que decide salir en su busca y logra hallarlo. ¡Bien por él!

El texto del libro es sencillo y comparte el peso narrativo con las ilustraciones, que van guiando al lector por las ideas y venidas del cordero. En las ilustraciones dominan los colores insaturados, que transmiten una sensación de tranquilidad y calma, salpicados por los guiños rojiblancos que hacen avanzar la trama. Miriam Koch juega con la cámara, intercalando planos del paisaje con otros mucho más cercanos y atentos al detalle; se atreve también con angulaciones cenitales para mostrarnos el trayecto de Fede casi como si de un mapa se tratase. El formato, además, muy alargado, contribuye con su marcada horizontalidad a la idea de viaje, de extenso recorrido, tanto en el tiempo como en el espacio. Recuerda en este sentido a ¿Un paseo?, por cómo se fuerza la mirada del lector de izquierda a derecha más de lo habitual.

Fede Diferente es una obra original, estéticamente bonita y que deja un poso de sosegada alegría que resulta reconfortante.