¡Soy un blop!

¡Soy un blop!

Hervé Tullet: ¡Soy un blop! Madrid: Kókinos, 2013, 118 pp.

Hervé Tullet es sin duda uno de los nombres propios del mundo de la literatura infantil y su sello personal se repite en cada nueva obra que publica. En este caso ¡Soy un blop! no es lo que se dice una novedad editorial, la edición es de 2013, pero nos había pasado desapercibido y no hemos querido dejar escapar la ocasión de hablar de él.

La forma protagonista de esta obra nos saluda desde la portada, en un llamativo tono naranja sobre fondo rosa, augurando la explosión cromática que se desparrama a lo largo de las páginas siguientes. Se trata de un blop, un ente que crece, empequeñece, salta, corretea por la hoja, se multiplica y se divide a cada rato, cambia de color, de texturas, a veces parece que hasta de forma, pero en el fondo mantiene la esencia blop, sea la que sea. 

Esta vez no se invita al lector a participar de manera tan interactiva como en Un libro, donde nos pedían que agitásemos, girásemos o aplaudiésemos para ver luego el resultado de nuestras acciones en los círculos protagonistas. En este caso los blop van cambiando y moviéndose a su gusto, sin nuestra intervención y sin un hilo narrativo definido, sino con una sucesión de dobles páginas en las que prima el disfrute estético y formal. En alguna ocasión, de hecho, recuerda a la experimentación de formato y materiales que proponía Bruno Munari en sus Prelibri.

Una obra que se presta al juego y a la creatividad, proponiendo tácitamente al lector que cree sus propios blops, que pruebe a inventar dobles páginas con situaciones diferentes en las que se desvelen nuevos aspectos de estas simpáticas formas.