Luna y el pequeño pajarito
Íñigo Lombardía Ledo (autor), Jessica Villalobos (ilustradora): Luna y el pequeño pajarito. Sevilla: mr.momo, 2019, 36 pp.
A lo largo de nuestra vida todos hemos oído hablar de gente que tiene buen corazón o que tiene un gran corazón. Y desde bien pequeños han tratado de inculcarnos que tener buen corazón nos hace mejor persona. Pues este libro mantiene esa enseñanza, pero lo define como ser niños y niñas corazón.
Las protagonista de este libro, Luna, es una niña que no entiende que es hacerse mayor puesto que ella se siente igual después de cumplir 5 años. Luna es una niña especial, es una niña corazón. Y esta historia relata como Luna un día vio nacer un pajarito y cómo decide cuidarlo y hacerle compañía cuando está solo. Un interesante relato en el que el pajarito se comunica con la protagonista a través del corazón para agradecerle lo que ella está haciendo por él.
La construcción narrativa de la historia es clásica y el autor emplea una gran variedad y riqueza de lenguaje y vocabulario que, aunque puede resultar inicialmente compleja para los lectores, va acompañado de aclaraciones que les permiten continuar con la lectura sin inconvenientes.
Las ilustraciones acompañan al texto de manera directa, pero sin invadir su espacio ni añadir información. Estas ilustraciones simbolistas y delicadas cumplen una función decorativa, soportando gráficamente la información presentada en el texto.
Este libro se centra desde la primera hasta la última página en los niños y niñas corazón, y trata de explicar cómo ser uno de ellos. Si bien es muy evidente y consistente el mensaje de “ser corazón” el autor propone ventajas de esta forma de ser y expone a la protagonista como un claro ejemplo de cómo conseguirlo.
Se trata de un cuento ilustrado adecuado para los primeros lectores un poco más experimentados, a partir de los 5 años, que ya han comprendido las reglas de la fantasía y son capaces de hilar la lectura por sí solos. Además, este cuento se presta a hablar y trabajar con ellos valores y emociones, reflexionando sobre distintas acciones que nos ayudan a “ser niños o niñas corazón” e identificando las emociones que sentimos en esas situaciones.