Jorge Bucay (autor) Gusti (ilustrador): L’elefant Encadenat. Barcelonaa: SerreS, 2008.

L’elefant encadenat narra la historia de un niño al que le gustaba mucho ir al circo, le encantaba ver las actuaciones con animales, y el que más le gustaba era el elefante. Sus grandes dimensiones y su fuerza descomunal le impresionaban. Después de la función, el niño iba a visitar a los animales. Su gran sorpresa fue cuando vio al elefante encadenado a una pequeña estaca, de la cual hubiera podido escapar sin ningún problema. El chico no entendía cómo el elefante, capaz de derrumbar muros y arrancar árboles, no escapaba de ese minúsculo tronco clavado al suelo. Sus padres le dijeron que, como el elefante estaba amaestrado, por eso no escapaba, pero al chico no le convenció la respuesta: “si estaba amaestrado, ¿por qué lo tenían atado?”.

Un día, alguien muy sabio le dio la respuesta: “El elefante del circo no se escapa porque está atado en una estaca desde que era muy, muy pequeño”. El chico empezó a imaginarse al pequeño elefante intentando escapar día tras otro de esas ataduras, sin conseguir su propósito, hasta que un día desistió, pensando que nunca podría liberarse, aceptando su impotencia y resignándose a su destino. Desde entonces, el elefante nunca más volvió a cuestionarse sus posibilidades.

Esto es lo que pasa con algunas personas, que viven encadenadas a estacas que privan su libertad, pensando que no pueden realizar algo, por el simple hecho de que un día, hace mucho tiempo, lo intentaron y no lo consiguieron. Se trata de creencias que viven arraigadas en nuestra mente y que nos hacen creer que nunca podremos hacer tal o cual cosa. Esto nos hace reflexionar sobre la importancia de conocer nuestras capacidades y posibilidades. Somos capaces de hacer cualquier cosa que nos propongamos, sólo tenemos que creer en nosotros mismos, ser positivos y pensar que podemos con eso y con mucho más. Las cadenas más poderosas son las internas, las existentes en nuestras mentes, esas que no nos dejan volar y condicionan un “yo” que, posiblemente, ya ha dejado de existir, ese que “no pudo con…”

Este fragmento podría describir perfectamente la intencionalidad de este libro:

Hi ha nits que somio que m’apropo a l’elefant i li dic a cau d’orella: «Saps? Te m’assembles. Tu també et penses que no pots fer moltes coses només perquè una vegada, fa temps, ho vas provar i no te’n vas sortir. Però has de saber que el temps ha passat i que ara ets més gran i més fort que abans. Si ets vols alliberar de veritat, segur que ho pots fer. Per què no ho proves?

¡Acabemos con nuestras propias ataduras! ¡Luchemos por nuestros sueños! Nadie ha dicho que esto sea fácil, pero no nos rindamos a la primera de cambio. El esfuerzo, la perseverancia, la confianza en uno mismo… ayudan a construir un nuevo camino en nuestra vida, un camino lleno de éxitos, donde la libertad es la gran protagonista.