7 llaves de cuento

7 llaves de cuento

Antonio Rubio (texto), Violeta Lopiz (ilustraciones). 7 llaves de cuento. Pontevedra: Kalandraka, 2008, 98 pp.

Por fin un libro que expone de forma sencilla, para todo tipo de lectores y con diferentes objetivos (placer, investigación, conocimiento, colección o aplicación práctica en las aulas) el fascinante mundo de los cuentos populares, los de siempre. Aquellos que se transmitían de forma oral entre generaciones y que en cada zona se conocían con diferentes variantes o versiones.

¿Quién no ha escuchado la historia del Señor don Gato?

Estaba el señor don Gato/ sentadito en el tejado,/ marra-miau-miau, miau-miau,/ cuando recibió una carta, …

Y, ¿ quién es capaz de negar no quedarse sin palabras tras escuchar el cuento del candado?: 

Este es el cuento del candado,/ apenas lo empiezo, ya se ha terminado.

Resulta difícil no predecir cómo sigue el cuento de:

Éranse una vieja y un viejo / que solo tenían un queso,/ y vino un ratón y se lo comió. / Y vino el gato / y mató al ratón/ que se comió el queso/ de la vieja y el viejo. / Y vino el perro/ que se comió al gato...

Se trata de cuentos breves con rima o sin ella, pero siempre con mucho ritmo y humor concebidos para ser cantados y que una vez escuchados nos rondan por la cabeza. El autor es un maestro de escuela de los de siempre que gusta de escribir y que ha tenido el acierto de elaborar este  exquisito manual que no debería faltar en ninguna biblioteca. 

Una maravillosa recopilación que empieza con una introducción donde se concentra toda la explicación teórica -muy concisa y suficiente- además de proponer un taller con la intención de recoger y clasificar otros cuentos que también puede dar lugar a la creación.

El cierre lo constituye la referencia a la fuente original de los cuentos y la bibliografía consultada. Los siete capítulos se corresponden con las siete estructuras típicas que el autor llama llaves y que recogen hasta veintiséis muestras de cuentos. Verso y estribillo; enumeraciones; encadenados; adición y sustracción; diálogos; pareados y aleluyas y, por último, romancillos.

 

Muchos de los cuentos nos resultan conocidos porque eran los que solíamos cantar al saltar la comba, para echar a suertes y para entretenernos en las noches de verano en compañía de nuestra familia. 

Un tesoro que no podemos dejar perder y que cuenta con una presentación fabulosa porque algunas páginas son en color crema y los títulos en letras de diferentes colores. Totalmente recomendado para rememorar las historias de nuestra infancia y para recuperar o crear nuevos cuentos si decidimos organizar un taller con este fin que se propone en la introducción.

Una muestra del interior del libro: