Flowy

Gilberto Mariscal (autor), María Jesús Jímenez (ilustradora): Flowy. Chuwy, 2015, 23 pp.

En este libro, Flowy¸ una historia de la colección El mundo de Lucía, la protagonista recibe una flor de regalo a la que llama Flowy. Llevar a Flowy a casa supone una gran alegría para Lucía puesto que así tendrá una amiga con la que jugar, pero también supone una gran responsabilidad puesto que Lucía tendrá que cuidar de la flor. 

En casa, Lucía juega con su amiga y la cuida durante mucho tiempo, pero cuando llega su cumpleaños y recibe regalos se entretiene con ellos y se olvida de cuidar de su amiga. Este olvido supone una falta de cuidados que hace enfermar a Flowy. Lucía, al darse cuenta, se pone muy triste, no ha cumplido con su responsabilidad y eso ha hecho enfermar a su amiga¿se recuperará Flowy cuando Lucía vuelva a cuidar de ella? 

Este relato cuenta con una estructura simple en la que planteamiento, nudo y desenlace son claramente diferenciables. El lenguaje empleado por el autor es sencillo y propio de los cuentos animados, además presenta numerosos diálogos que aportan fluidez y dinamismo al relato, pero que pueden resultar algo confusos para los lectores menos experimentados. 

Al tratarse de un cuento basado en una situación cotidiana en la infancia, que además incluye algún elemento fantasioso, los lectores se sentirán identificados desde el inicio del relato con la protagonista. Asimismo, la temática del relato, los valores de amistad y responsabilidad, resultarán familiares a los lectores; facilitando de esta manera la comprensión de la clara y explicita moraleja que presenta la historia.  

Debido a sus características el cuento se presta a trabajar con los lectores sobre los diferentes valores destacados en la historia y a comentar diferentes situaciones cotidianas en las que estos valores estén presentes. 

Se trata de un libro ilustrado en el que la ilustradora, Chuwy, consigue reproducir de manera visual las ideas más importantes del texto, a través de una serie de imágenes simbolistas llenas de detalles y vivos colores. 

Debido a su estructura de relato simple, las coloridas y detalladas imágenes y la tipografía ligada podemos decir que se trata de un cuento ilustrado apto para un público infantil a partir de los 3 años y recomendable para primeros lectores autónomos.Â