Aron Dijkstra: El pequeño Jorge y el dragón. Alzira: Algar, 2018. 24 pp.

¿Qué pensamos cuando vemos una portada de este estilo? Podría ser que nos vamos a encontrar con caballeros que combaten contra dragones. En este caso, podríamos decir que es un intento de combate,  y la portada nos anticipa que algo no va a salir como esperamos. 

En este cuento escrito e ilustrado por Aron Dijkstra, se desmonta el carácter agresivo de los dragones y se ve cómo en ocasiones las apariencias engañan. Jorge, aprendiz de caballero, quiere ser el «valiente» que suba a la cima de Astarrota a derrotar al viejo dragón, pero en sus numerosos intentos de actuar como caballero valeroso lo único que encuentra es a un dragón que se opone a luchar con él porque lo único que quiere es tener su compañía.

Historia para trabajar la amistad y los prejuicios, tanto en el aula como en familia. En mi caso, contado y trabajado en ambos lugares y viendo cómo a los más peques les provoca una sonrisa, y alguna risa, todo el relato, dejando un sabor de boca muy agradable el final.

No puedo cerrar la reseña sin dar valor a las ilustraciones hechas por el propio autor, en el que presenta unos dibujos hechos a lápiz y témpera, así  como a la fabulosa  edición de Algar con páginas gruesas y tipografía de lectura fácil para los más pequeños.