La bruja del pan pringao
Pilar Mateos (autora), Horacio Elena (ilustrador). La bruja del pan pringao. Editorial Algar. Colección CalcetÃn. 2014
 La bruja del pan pringao es una aspirante a bruja que vive en una ciudad cualquiera. Como cualquier niña juega y juega y al ser bruja las trastadas a las que llegan están invadidas de magia, diversión y humor.
Vive con su hermana mayor, una bruja en toda regla, aunque para una brujita pequeña las ganas de jugar y curiosear pueden provocar situaciones absurdas y delirantes.
Con eventuales accesos al imaginario literario referente a brujas, la pequeña brujita por más que lo intenta es tan adorable que a nadie se le ocurre pensar que es una verdadera bruja. La distancia que separa a una bruja con un hada se diluyen en este relato.
Elefantes de azúcar, llaveros fosforescentes o relojes de cucú en miniatura son algunos de los ingredientes que la autora propone para convertir a la brujita en dichosa. En estas lÃneas intuimos un ligero corte moralista donde pequeñas y simples cosas pueden dar lugar a la felicidad frente a un consumismo excesivo y desmesurado.
Artilugios mágicos, mucho teatro y una buena dosis de infancia es lo que encontramos entre sus páginas.
La autora utiliza un lenguaje sencillo y asequible con un tono poético en la prosa que facilitan la anticipación en la lectura y desarrollan la memoria lectora.
Una historia muy bien hilada con una redacción impecable encaminada a una comprensión absoluta desde el punto de vista emocional o sensitivo.
Definitivamente las brujas se han colado por la puerta grande en la literatura infantil (puedes encontrar otras reseñas sobre brujas aquÃ, aquà y aquÃ).